Una de esas cosas...

                                                                                                                                                     

Debilitada me despierto entre el día y la noche.

Tengo una pared y una puerta, una solución y una oscuridad. 

Tengo días y tengo noches.
En las noches, la luna que es vestigio de luz, flota en el cielo, toma de la mano alguna ilusión, esa que de noche se siente más cercana y pareciera que es posible tocar..

En los días, sale el sol y eso, ya es un empujón al vivir, pero 

 me faltan muchos movimientos o algunos cambios. 

Giros, contradicciones , mareos de palabras, duermen y despiertan al lado mio ...

Mi cuerpo recibe opciones de todos lados, y tiene huellas y no es tan dócil. Quiere absorber el afuera, incrementar sus saberes, hacer realidad sus sueños. 

y así, no solo tengo mente en movimiento, es mi cuerpo el que anda por ahí y es reserva de mis pensamientos superpoblados… 

y son mis pensamientos los que atraviesan mis ojos,  

mis manos, 

mis piernas...

Sensibles seres blancos, puros como el agua, miran el mundo adulto desde abajo y ven más de lo que se cree.

                                (por  Chacho Baltar)

Cabecitas productoras de imaginaciones, se dedican a jugar y en sus juegos, cualquier cosa puede convertirse en cualquier otra.

Sus pasitos impredecibles, caminan rompiendo rutinas absurdas

Sus cuerpitos, demandantes de cuidados, lo que más necesitan es afecto.

Son pulguitas que atraen toda la atención, que desconocen el mundo real y que juegan asomándose por el balcón a él.

Impulsivos e impulsores, no tienen secretos, todo lo expresan.

Entusiastas  de cosas simples, nos enseñan lo verdaderamente importante.

Pura vida en acción.

Sus juguetes tienen personalidad en sus manos y el preferido vida propia.

Son lucecitas exploradoras en permanente aprendizaje y creación.

Sus vidas iluminan todo a su alrededor y transforman cada momento en algo nuevo por vivir.

Sus dibujos espontáneos, obras de arte.

Sus gestos, alegría para el mundo.

Vocecitas que todo lo preguntan, nos dejan pensando.

Dormidos, nos hacen tocar la paz.

Despiertos y enérgicos, nos ponen en ritmo y nos hacen bailar su danza.  

mi otoño

Me gusta caminar el otoño, tiene un algo de transición y de renovación.

Las hojitas naranjas y amarillas vuelan por las calles de mis días, como acariciando magicamente mis miedos...

El otoño,

tiempo de cambio, de renovar vestimentas, de dejarse volar con las hojas que caen, caer con ellas.  

Tiempo en que los árboles habitan desnudos y muestran sus rarezas contenidas en el disfraz del verano.

                                                                  Vladimir Merchensky

Los árboles,

con sus ramificaciones inacabadas, se entretejen entre ellos como si se abrazaran.  

Son  búsqueda.

Quieren llegar a lo más alto del cielo...

Se sacan su afuera, muestran sus debilidades.

Quedan flacos, débiles, pero siguen siendo…Simplemente, naturalmente…

Y las hojas...
                    voladoras

flotan por las veredas,

se arrastran, se ensucian, se van…

escriben en su andar la transición de los ciclos que son círculo, 
que nacen y que mueren, 
que se transforman…

que, felizmente, se transforman...